Junto al río, en una mansión de 1890 y con una terraza sombreada, las personas que se acercan a Basse-Goulaine tienen la suerte de disfrutar de la elegante e inmaculada decoración (salpicada de butacas violeta) y de ser recibidos con una atención divina. Por supuesto, su chef Jérôme Ponchelle no desentona con tan maravilloso encuadre: ofrece una cocina gastronómica refinada con una fuerte identidad regional donde realza los productos del lugar (ancas de rana, pescado del Loira, queso Curé Nantes). Carta de vinos para disfrutar.
Corazón de mollejas de ternera con crema de colmenillas y setas
Medallones de rape con risotto al azafrán, habas y chorizo
Solsticio de chocolate negro con mousse de praliné, bizcocho joconde y sorbete de limón