Una antigua posada a orillas del Sèvre, a las puertas de Clisson, recuperada por dos parejas de amigos bien inspirados. En la terraza evocando las verbenas en los días soleados o en una sala grande y acogedora cuando el clima es menos favorable, se sirve una buena cocina bistró clásica, así como platos más atrevidos y contemporáneos, según el mercado y el estado de ánimo del chef. La carta incluye una buena selección de muscadets y otros vinos locales.
Langostinos en gabardina kadaif, hierbas marinas y limón
Medallón de rape, coliflor y romanesco, consomé de espinacas
Pecado de zanahoria y jengibre (compota, sablé, mousse de zanahoria, sorbete de jengibre)