Local regentado por la joven Elisa Pichaud con solo 26 años y que antes trabajó en Monté-Christo. Es ideal para ir en pareja y dejarse sorprender por sus recetas fusión que mezclan la cocina francesa e italiana (Pichaud también trabajó en uno de los 10 mejores restaurantes italianos del mundo) y la asiática. Unas combinaciones gastronómicas originales para disfrutar en dos salas con paredes de piedra, vigas vistas, suelo de madera y chimenea (que funciona en invierno) en un ambiente sereno y acogedor.
Snack de vieiras con puré de boniato a la trufa
Jarrete de cordero, polenta cremosa al estragón
Coulant de chocolate y helado de leche de almendra